La pregunta crucial ¿Qué es un emprendedor?
Para abordar este tema hay una infinidad de respuestas, entre las cuales se destaca la teoría de emprendimiento de Andy Freire, la cual expresa: “Un emprendedor es una persona que detecta una oportunidad y crea una organización (o la adquiere o es parte de un grupo que lo hace) para encararla”, “el proceso emprendedor comprende todas las actividades relacionadas con detectar oportunidades y crear organizaciones para concretarlas”. Las anteriores definiciones nos ayudan a comprender que no hace falta ser rico ni joven ni necesariamente haber pasado por la universidad para emprender. Lo que se necesita es tener coraje y convicción en lo que uno quiere emprender.
Existen diferentes tipos de emprendedores, en primer lugar, los luchadores: son aquellos que apuntan hacia una actividad de emprendimiento como la única manera de subir un escalón en la jerarquía de logros personales o económicos debido a que acogen esta idea como su única manera de desenvolvimiento; segundo los caza-olas: estos emprendedores están ligados a las tendencias de moda que el mercado ofrece en ciertas estaciones del año y por último los gladiadores: quienes asumen la idea de emprendimiento como una idea cultivada a lo largo de procesos de evaluación que desde su punto de vista asumen fuera de una tendencia o corriente y la llevan a cabo como iniciativa propia.
Una de las semillas que Andy Freire desea plantar en la mente y corazón de cada nuevo emprendedor alrededor del mundo es la promoción y la aceptación del cambio como punto angular para la innovación sin la necesidad de la transformación de las nuevas corrientes que se van generando, para esto él asume que las nuevas corrientes con las cuales los emprendedores han ido alimentando su inventiva y las próximas que se gestarán a futuro deben ser acogidas, en conjunto con las actuales, como una fuente de enseñanza e información para la creación de futuras ideas. Ya que, según afirma el cambio que el mundo está experimentando día tras día es exponencial y se requiere de líderes que sean capaces de adaptarse, que posean un pensamiento disruptivo e innovativo que fortifique las bases de la inventiva pero que a su vez prevalezca el espíritu crítico que permita comprender las limitaciones que cada uno posee como individuo, ya que en la práctica del liderazgo el sujeto debe desacoplar su mente del “individuo” y adoptar un comportamiento grupal enfocando los objetivos propios como un objetivo grupal posicionándonos como protagonistas en el actuar y la toma de decisiones, fortalecidos con una cultura de trabajo que permite resultados extraordinarios, en el cual cada uno de los entes aporta íntegramente en la creación y desarrollo.
Andy Freire también explica el proceso del emprendimiento mediante el triángulo invertido el cual indica que en el punto de apoyo (el vértice de abajo) está el emprendedor; en el vértice de arriba a la derecha está el capital y en el izquierdo, el proyecto o la idea. Todo proceso emprendedor integra estos tres componentes. Cuando un emprendimiento no es exitoso, siempre se debe a una de estas tres razones, o a una combinación entre ellas: el emprendedor no fue bueno, no se obtuvo el capital o el proyecto emprendido era el equivocado. Analizando bien la figura, comprenderemos que el triángulo se apoya en el propio emprendedor, de su firmeza depende, en gran medida, que el modelo no se derrumbe. El emprendedor brillante siempre logra el capital o el gran proyecto.
Si la clave es el propio emprendedor y su capacidad, la pregunta es cómo puede formarse. Hay gente que dice que es imposible modificar ciertas características innatas, y que esto es lo determinante a la hora de emprender. «Es un emprendedor nato, vende como nadie, maneja gente como nadie» son frases que oímos a diario sobre muchos emprendedores exitosos. En cambio, otros aseguran que «todo se hace, nada está establecido, todo se puede desarrollar», pero para Freire su visión está entre esos dos extremos, entre lo modificable y lo inmodificable, está lo que Fred Kofman llama el «área gris de lo tal vez modificable», Fred y Andy lo llaman meta-habilidades, son precisamente esas las características comunes que tienen los grandes emprendedores. Con lo anterior Freire nos da a entender que un emprendedor no nace sino que se hace, es aquella persona que debe estar seguro de ser emprendedor pero, no solo eso sino fortalecer sus habilidades llegando a ser un emprendedor capacitado, lo que lo convertirá realmente en un mejor emprendedor que se permite soñar, asumir un papel incondicional, de continuo aprendizaje y trabajo interno, desarrollar su autoestima para lograr mayor firmeza en sus decisiones, enamorarse y apasionarse de su proyecto con un compromiso incondicional, aprender a compartir con su equipo, tomar riesgos para lograr su independencia y, sobre todo, aprender a divertirse en el proceso de sus propios aciertos y errores.
Las cualidades que todo emprendedor debe tener según Andy Freire son:
1° El desencarcelamiento respecto de poderes que una autoridad o cualquier clase barrera nos determine como subordinados y nos imposibilite la independencia de ideas.
2° La capacidad de contención ante los deseos vehementes de la apropiación de objetos materiales y la idealización del objetivo económico como motivación principal para el inicio de una actividad de emprendimiento.
3° La gestación de un deseo o ansia inverosímil pero que abarque una complejidad de emociones vehementes a la hora de emprender.
4° Aunque la base para llevar a cabo una actividad de emprendimiento tiene un origen subjetivo pero que se enfoca en el cumplimiento de metas reales y que abarquen resultados concretos.
5° A pesar que la actividad emprendedora debe ser algo constante y sin trabas los emprendedores no deben desasociar las creencias con las cuales la motivación y el enfoque de una persona se acentúa abarcando aquellas que no son netamente racionales sino que entran en un ámbito espiritual.
6° A pesar de que el practicante pueda ser inexperto a la hora de llevar a cabo esta actividad debe estar abierto a aprehender.
7° Disfrutar un equilibrio entre disfrutar cada paso del día y la dureza con la cual se enfrente a los obstáculos.
8° Una de las cualidades más importantes que debe ser inherente para un emprendedor es la comprensión de la necesidad de ámbitos grupales en el desarrollo de actividades de innovación, de creación o que abarquen cierta importancia, envergadura y esfuerzo.
9° Es de gran relevancia la determinación de términos, el establecimiento de márgenes de tiempo, para el desarrollo de una actividad óptima que sea firme y que provea seguridad a quienes se embarquen en la formación de una idea de emprendimiento.
10° Es necesario La fomentación de imágenes con las cuales podamos recrear mentalmente nuestros objetivos a su vez con la creencia de que en lo que nos vamos a embarcar tendrá éxito y se conseguirá, con esto avanzamos con pasos seguros hacia el futuro. Entre otros.
Remitiéndonos al triángulo invertido, este también ayuda a entender por qué mucha gente cree que solo los hijos de ricos pueden emprender debido a que la mayor dificultad es encontrar el capital semilla sin embargo como se dijo anteriormente un emprendedor audaz siempre logra conseguir el capital con un gran proyecto y su persistencia ante este.
Para concluir depende de cada emprendedor su éxito o fracaso, una frase que nos llamó la atención de este emprendedor fue: “El proceso emprendedor tiene una cantidad enorme de obstáculos, y la diferencia entre los emprendedores exitosos y quienes no lo son, está justamente en la manera de afrontar con entereza y altura esas dificultades”, hay que ser firmes en las decisiones, saber lo que queremos ser, plantear metas y poner pasión por cumplirlas, así llegaremos a tener éxito y seremos grandes emprendedores.