Estaba agitado, no sabía que es lo que ocurría en mi pecho. Era un impulso, un ímpetu algo que me llevaba a un lugar, a un sitio desconocido, oscuro. Tal vez solo es un impulso emocional.
Cierro mis ojos, todos esos sonidos las sirenas, el viento, los gatos saltando en el techo. Todo colisiona pero el peso en mis ojos es muy agobiante y tengo que ceder.
No sé cuanto pasó, una hora o 20 minutos.
Abro mis ojos y estoy en una sala de estar desconocida para mí; mis ojos no entienden qué es lo que ocurre en este entorno desconocido, solo sé que no hay un vacío.. y de repente escucho una voz , dulce, suave y conocida. Esto lleva mi atención hacia esta figura definida, esta silueta negra que no puedo definir qué significa pero sé que su peso es agobiante.
No comprendo lo que ocurre después.
Su suave toque recorre mis manos y pasa por mi pecho, siento su presencia y su calor. Aquella sensación que no conocía desde hace muchos años y esto me lleva, y se apodera de mi porque quiero seguir, quiero seguir ahí.
Ahora veo, ¿esto es lo que quería? o solamente es mi deseo, mi cuerpo, mi descarga sensorial a través de esta hipnosis, tal vez solo es cuestión del momento.
Ya no me importa, todo lo demás se fue estoy aquí con su silueta, con su toque.
Pero debo despertar.